Armstrong ofrece una gama completa de serpentines capaces de gestionar prácticamente cualquier servicio: desde aplicaciones de poca potencia a los trabajos industriales más duros y fuertes. Nuestra capacidad de personalización nos permite construir literalmente un serpentín que haga exactamente lo que usted necesita. Nosotros no ofrecemos soluciones estándar. Podrá trabajar con el serpentín que necesite, no con un compromiso que esté disponible por azar.
Los serpentines de Armstrong se han diseñado y fabricado para proporcionar un rendimiento duradero en sus aplicaciones de calentamiento, enfriamiento y secado de proceso. Con décadas de experiencia en la solución de problemas de circuitos de vapor, Armstrong puede ofrecer una propuesta de sistema para las necesidades de calentamiento y enfriamiento. Y no lo olvide: Armstrong ofrece también una gama completa de calentadores unitarios, de puerta y de depósito.
Una vida más larga en los entornos industriales más duros
Cuando se trata de una vida más larga en condiciones industriales duras, Armstrong es todo lo que necesita saber sobre serpentines. Incluso en los entornos más severos en los que el goteo de los serpentines y la corrosión son problemas costosos, los serpentines Armstrong mantienen una eficacia y un rendimiento elevados.
Armstrong: Por qué y cómo
El motivo por el que los serpentines Armstrong son tan fiables es su capacidad de mantener el rendimiento de la transferencia de calor y de resistir la corrosión tanto interna como externa. Como los construimos es su garantía de rendimiento duradero, incluso en los entornos de funcionamiento más exigentes.
Los serpentines que gotean son una mala inversión, porque son el principio del fin de una transferencia de calor eficiente. Aunque los serpentines pueden fallar por muchos motivos, en la mayoría de casos, los culpables son los fallos mecánicos y la corrosión. Cuando los serpentines se corroen, la humedad y los contaminantes no deseados pueden contaminar la corriente de aire o los gases de escape. Y un goteo de vapor de un serpentín corroído emite a la atmósfera una energía muy valiosa.
Corrosión externa. Los contaminantes en el vapor de aire provocan corrosión externa. La acumulación de residuos intensifica la acción corrosiva al retener contaminantes en depósitos concentrados. Y se acelera aún más cuando los residuos se pierden en forma de vaho denso transportado por aire. Algunos factores como puntos de aleta inadecuados, algunas técnicas de fabricación o la selección de materiales también pueden acelerar la corrosión externa.
Corrosión interna. Las principales causas de la corrosión interna son la retención del condensado contaminado y el venteo inadecuado de los gases no condensables. Cuando el CO2 se disuelve en el condensado que se ha enfriado por debajo de la temperatura del vapor forma un ácido carbónico muy corrosivo. De forma similar, el oxígeno que se deja estancar en el sistema fomenta la acción corrosiva al horadar las superficies de hierro y acero. Unir tuberías y tubos en colectores de distintos materiales puede producir una acción galvánica. Las tensiones internas resultantes de una soldadura inadecuada también pueden acelerar los daños por corrosión.
Armstrong acude a su auxilio
La ayuda sobre el terreno que Armstrong ofrece para la selección y el diseño de serpentines es una de las mejoras defensas que puede tener contra la corrosión externa. Ofrecemos una amplia selección de puntos de aleta para ayudarle a combatir la acumulación de residuos. Además, las sólidas aletas aportan una fuerza extraordinaria para soportar la limpieza a alta presión sin daños o deformación. Como defensa contra los factores que no están relacionados con el medio ambiente, Armstrong fabrica serpentines en una amplia gama de metales y aleaciones. También puede especificar revestimientos especiales para aumentar la resistencia externa a la corrosión.